poder sumergirse en el fondo del mar en su vehículo, al estilo James
Bond? Pues ahora esto es posible.
Frank M. Rinderknecht, visionario del automóvil y jefe del fabricante
suizo Rinspeed, ha convertido la ciencia ficción en realidad. Él creó
SQuba, el primer vehículo submarino convertible con el que se podrá
bucear a una profundidad de 10 metros. Para ello, este auto cuenta con
tres motores, uno para la propulsión en la superficie y los otros dos
que hacen posibles sus inmersiones.
Tiene una cabina totalmente abierta, lo que garantiza la seguridad de
sus ocupantes en caso de emergencia y, a la vez, lo vuelve mucho más
liviano. Esto, porque 2 metros cúbicos de aire comprimido por una cabina
cerrada significarían
2 toneladas más de peso para el automotor.
Los ocupantes del vehículo pueden respirar mientras disfrutan del mar,
gracias a un depósito de aire comprimido similar al que utilizan los
submarinistas, por ello, el biplaza cuenta con tanques de oxígeno, que
garantizan el suministro por varias horas.
El fabricante asegura que este modelo “es ecológico”, ya que sus tres
motores usan energía eléctrica con baterías de ion-litio y los
lubricantes usados son biodegradables, lo que evitaría que cuando
ingrese al mar, los químicos se puedan mezclar con el agua.
Uno de los motores del Rinspeed SQuba se utiliza para la propulsión
terrestre y los otros dos para la marítima. Además, incorpora todo tipo
de sistemas de ahorro de energía, como por ejemplo un sistema de
alumbrado compuesto únicamente por focos LED.
Asimismo, el vehículo cuenta con un sistema de dirección mediante el uso
de láser, que permite al vehículo conducirse de forma autónoma y sin
intervención del conductor o del copiloto.
Una tecnología similar a los automotores que se manejan de forma
autónoma, como el Google car o el Audi.
En tierra es capaz de alcanzar los 120 km/h y de acelerar de
0 a 80 km en apenas 7,1 segundos. Pero sobre el agua es capaz de navegar
hasta 6 km/h y bajo él ‘bucea’ a 3 km/h. Eso sí, sus inmersiones no son
muy profundas, ya que no puede superar los 10 metros.
¿Alguna vez se imaginó
poder sumergirse en el fondo del mar en su vehículo, al estilo James
Bond? Pues ahora esto es posible.
Frank M. Rinderknecht, visionario del automóvil y jefe del fabricante
suizo Rinspeed, ha convertido la ciencia ficción en realidad. Él creó
SQuba, el primer vehículo submarino convertible con el que se podrá
bucear a una profundidad de 10 metros. Para ello, este auto cuenta con
tres motores, uno para la propulsión en la superficie y los otros dos
que hacen posibles sus inmersiones.
Tiene una cabina totalmente abierta, lo que garantiza la seguridad de
sus ocupantes en caso de emergencia y, a la vez, lo vuelve mucho más
liviano. Esto, porque 2 metros cúbicos de aire comprimido por una cabina
cerrada significarían
2 toneladas más de peso para el automotor.
Los ocupantes del vehículo pueden respirar mientras disfrutan del mar,
gracias a un depósito de aire comprimido similar al que utilizan los
submarinistas, por ello, el biplaza cuenta con tanques de oxígeno, que
garantizan el suministro por varias horas.
El fabricante asegura que este modelo “es ecológico”, ya que sus tres
motores usan energía eléctrica con baterías de ion-litio y los
lubricantes usados son biodegradables, lo que evitaría que cuando
ingrese al mar, los químicos se puedan mezclar con el agua.
Uno de los motores del Rinspeed SQuba se utiliza para la propulsión
terrestre y los otros dos para la marítima. Además, incorpora todo tipo
de sistemas de ahorro de energía, como por ejemplo un sistema de
alumbrado compuesto únicamente por focos LED.
Asimismo, el vehículo cuenta con un sistema de dirección mediante el uso
de láser, que permite al vehículo conducirse de forma autónoma y sin
intervención del conductor o del copiloto.
Una tecnología similar a los automotores que se manejan de forma
autónoma, como el Google car o el Audi.
En tierra es capaz de alcanzar los 120 km/h y de acelerar de
0 a 80 km en apenas 7,1 segundos. Pero sobre el agua es capaz de navegar
hasta 6 km/h y bajo él ‘bucea’ a 3 km/h. Eso sí, sus inmersiones no son
muy profundas, ya que no puede superar los 10 metros.
El SQuba se maneja bajo la filosofía de que “me permite ser uno con los
elementos de la naturaleza y sumergirme en un nuevo y fascinante mundo”.
Este vehículo usa la tecnología suiza Esoro, tanto en sus motores como
en sus componentes tecnológicos, de diseño y de ingeniería. Esta firma
ha trabajado durante 17 años en el desarrollo de productos y piezas para
automotores alrededor del mundo.
Las llantas, en cambio, son creadas por la empresa alemana AEZ. Este
diseño hace que sea posible que pueda pasar del calor del suelo al frío
del agua sin que exista ningún desgaste o se dañe el caucho del
neumático. Esta firma ha trabajado en varios modelos de la compañía
Rinspeed, como el eXasis lanzado en el 2007.
“El SQuba es un carro que no solo es funcional sino que además convence
con su estilo y diseño”, es parte de la filosofía de la compañía
Rinspeed. Con esto buscan posicionarse en el mercado mundial de los
autos diferentes y multiuso.
Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO en la siguiente dirección: http://www.elcomercio.com.ec/tendencias/vehiculo-submarino-ecologico-tecnologia.html. Si está pensando en hacer uso del mismo, por favor, cite la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. ElComercio.com
Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO en la siguiente dirección: http://www.elcomercio.com.ec/tendencias/vehiculo-submarino-ecologico-tecnologia.html. Si está pensando en hacer uso del mismo, por favor, cite la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. ElComercio.com